domingo, octubre 23, 2005

Este poema lo acabo de encontrar... hace tiempo lo buscaba; es de Pessoa, y es realmente muy lindo:

EL GUARDADOR DE REBAÑOS (II)

Mi mirar es nítido como un girasol
tengo la costumbre de andar por los caminos
mirando a derecha y a izquierda,
y de vez en cuando para atrás...

Y lo que veo a cada momento
es aquello
que nunca antes había visto,
y me doy cuenta muy bien...
Sé tener el asombro esencial
que tiene un niño, si, al nacer,
repara de veras en su nacimiento...
Me siento nacido a cada momento
para la eterna novedad del mundo...

Creo en el mundo
como en una margarita,
porque lo veo. Pero no pienso en él
porque pensar es no comprender...
El mundo no se hizo
para que lo pensáramos
(pensar es estar enfermo de los ojos)
sino para mirarnos en él
y estar de acuerdo...

No tengo filosofía: tengo sentidos...
Si hablo de la Naturaleza
no es porque sepa lo que ella es,
sino porque la amo, y la amo por eso,
porque quien ama nunca sabe lo que ama
ni sabe por qué ama, ni lo que es amar...

Amar es la inocencia eterna,
y la única inocencia es no pensar...

2 Comments:

At 4:12 p. m., Blogger Helen said...

Como estamos viviendo en estos tiempos, con tanta rapidez que no nos damos tiempo para mirar a los lados y menos para atrás,tampoco pensamos en nada.Gracias por tú poema que la ayuda a reflexionar, me encantan los poemas que no son melosos y este es uno de ellos.
Gracias por ayudarnos a ver parte de este mundo de los blog.
Nos vemos en clases.

 
At 4:16 p. m., Blogger Catalina Trujillo said...

Me encanta este poema de Pessoa. CUando estaba en la Universidad lo usé para un trabajo de fotografía. Hoy lo recordé y lo encontré gracias a tu blog.

Saludos.

 

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